viernes, 27 de junio de 2014

Mirate. Si es que mirate. Te sientes perdida, verdad? No entiendes nada. Bien, pues te fastidias. Yo hubiera preferido ser la mente de alguien fuerte, de alguna deportista tal vez. Pero me he tenido que conformar contigo, chiquilla enclenque. Pues ahora asume las consecuencias de tu destino. Para empezar, haré que tengas unos gustos de lo más raros. Si, me mola el riesgo… a ver si encajas en la sociedad de este mundo con ellos. Me voy a reir. Oh! Aprovecharé lo de los gustos raros para meter por ahí ideas psicopáticas y pervertidas. Si, que no conozcas limites. Tu pensamiento será retorcido y rebuscado. Sacarás conclusiones maquiavélicas, tendrás aspiraciones de grandeza. Pero vayamos más allá! Reflexión, mucha reflexión. Tendrás que usarme antes de hacer cualquier cosa, no dejaré que te me resistas. Aunque bueno, me tomare la libertad de descansar en los momentos más cruciales. Hablemos de setimientos. Si, mi obra maestra… tus sentimientos serán como una lavadora en marcha, como un tornado dentro de tu pequeño cráneo. No los pienso entender ni yo. Ni yo! Y carácter, que no falte el carácter! Algún arma defensiva tendré que dejarte, tampoco quiero sumirte en una depresión perpetua. Eso si, inseguridades y miedos siempre estarán presentes.

Ya  tengo todos los ingredientes preparados. Con este brebaje tendrás que encarar tu vida. Aunque tampoco te creas que está todo perdido… esto solo son los errores de fabrica, en tu mano está cambiarlos o no. Hagas lo que hagas, yo pienso seguir funcionando así que me va cojonudamente torturándote de esta manera. 

viernes, 20 de junio de 2014

fondos

FONDOS

Nunca me gustó dibujar los fondos. Siempre he pensado que en un comic lo importante son los personajes. Cuando lees uno siempre te fijas en ellos, en sus movimientos, sus expresiones… los fondos estás ahí y sabes que están ahí, pero no son lo esencial. Al menos no lo son para mi. Quizás solo sea un pretexto que uso para justificar el hecho de que se me de tan mal hacerlos, pero sea como sea, el caso es que no me gusta dibujarlos. Quizás sea por eso que a la hora de tener que escribir sobre mi –leer entre comillas – “lugar favorito” siento esta impotencia. Lugar favorito? Quién en su sano juicio llega a un sitio y dice “oh, que bonito, a partir de hoy este será mi lugar favorito”? el que haga eso es idiota. Yo no soy idiota, lo único que quiero es crear personajes. Que más me da donde se muevan? Que si, que los escenarios son importantes en una buena historia… pero para los personajes, no para mi. Que mejor escenario voy a tener yo que un escritorio? Vale que para mi ningún paisaje tropical se pueda comparar al olor a goma de borrar que hay en mi mesa de cristal las noches en las que el tiempo se para y me veo sumida en mis historias, las noches en las que mi mente y mi lápiz se conectan para crear mundos enteros dentro de los pequeños folios A4. Será ese mi ambiente, que no lugar, favorito? Y yo que se? Como si me lo fuera a plantear en ese momento. cuando disfrutas algo de verdad no te lo planteas, simplemente lo vives. Un lugar al que le haces miles de fotografías no es tu lugar favorito. Si fuera un lugar tan increíble no perderías el tiempo observándolo a través de una pantalla para encuadrar bien los planos de la foto y disfrutarías de tu presencia en el sin necesidad de máquinas. Bueno, en mi caso, para maquina, unos buenos auriculares para poder oír música y abstraerme del todo. Mi lugar favorito? Mis lugares favoritos. Ojalá pudiera yo entrar en la piel de los personajes que represento, y decir lo que dicen no escribiéndolo en mayúscula a lápiz dentro de los bocadillos sino expresándolo con mis propios labios. Sentir al igual que los hago sentir, vivir como los hago vivir, y moverse en ese paisaje abstracto que pese a no estar nuca dibujado, o pese a no estar bien dibujado, está incondicionalmente en mi cabeza. No me gusta dibujar los fondos, pero sé que mis personajes se mueven ahí. Y eso para mi es suficiente.fo

viernes, 13 de junio de 2014

20-06

Yo quería un niño. Aunque eso es lo que suelen decir todos los padres, no? Las madres quieren a una niña a la que vestir y comprarle muñecas, los padres queremos Un niño con el que jugar al futbol y hablar de coches. Sin embargo, ella fue niña. Y no sabéis como me alegró que ganase mi mujer.
Era la niña más bonita que había visto en mi vida. Sus ojos profundos e inocentes, su cabello sedoso y fino delicadamente cepillado … con solo observar su belleza cualquier pena desaparecía de mi corazón. Y no solo tenía un físico hermoso, sino que su espirito también brillaba por su simpatía. Lista y buena, nunca tuve que echarle ninguna bronca. Ni una sola vez.
Pero entonces llegó el día de su séptimo cumpleaños. Aquél día me tocaba a mí ir a buscarla al colegio. Le habíamos preparado una fiesta sorpresa. Cuando la vi esperándome, con su radiante sonrisa y sus mechones tostados al viento, no pude resistir el impulso de ir a abrazarla. Pero entonces apareció el camión de los helados. Maldito camión de los helados. “Puedo?” preguntó ella. “solo porque es tu cumpleaños!” le dije yo, riendo. Solo porque es tu cumpleaños. Esas fueron las últimas palabras que le dirigí a mi hija antes de que desapareciera de mi vida para siempre.
Que qué le pasó? A día de hoy aún no lo tengo claro. Solo sé que cuando el camión arrancó ella ya no estaba. Por aquél entonces corrían rumores por el barrio sobre secuestradores de niños. Más tarde apareció una noticia en los telediarios unos traficantes de órganos pillados por la policía. Aunque tal vez simplemente era un pedófilo aburrido que no pudo soportar la tentación de llevarse a la rubita de ojos verdes. Quien sabe? Lo único que se con certeza, es que se la llevaron. La arrancaron de mis brazos. Confiscaron mi mayor tesoro. Se llevaron a mi pequeña Noé.
El mundo está podrido. La gente habla de estas cosas como si hablaran del tiempo o de recetas de cocina. La muerte ya no es noticia. En momentos como este, me alegro de haber elegido la rama ciencias. También me alegro de tener un coeficiente intelectual superior al resto de la gente. Es lo único por lo que me puedo alegrar ahora que ya no tengo lo que más quiero.
En una semana ya lo tenía construido. No me hizo falta mucho tiempo para elaborar el plan. Al fib y al cabo el mundo me lo había dejado claro. No creo en dios, pero si que creo en las señales del destino. Y aquello fue una señal. Para los católicos, soy algo así como un mesías. Pero otros podrían considerarme el diablo y tener la misma razón, pues voy a ser el responsable del apocalipsis.
Hoy hace siete años que desapareció mi niña. Hoy hace siete años que el rayo de esta torre, oculto como simple torre eléctrica, lleva disparando ondas protectoras a todas las niñas que nancieron en 2006. El rayo 20-06 tiene dos tipos de disparo distinto. El primero tiene la función de lanzar una dosis muy pequeña de ondas J para proteger las células de todas las cromosomas xx nacidas durante ese año. El segundo será activado dentro de tres horas y vendidos minutos. Tiene como función destrozar todas las células sin protección. De esta manera, todos los seres de la faz de la tierra serán aniquilados. Solo perdurará la pureza e inocencia de las niñas.

El mundo está podrido. Es mi deber purificarlo. Vengaré tu muerte, Noé. Pronto comenzará una nueva era. Una era sin maldad, sin rencor, sin odio, solo compuesto por pequeñas y dulces criarturitas como tú, de ojos grandes y profundos, de cabellos sedosos y finos, de bracitos pequeños y enclenques… ellas repoblarán y purificarán este planeta. No veo la hora de que todos os derritáis agónicamente y os coléis por las rendijas de las alcantarillas, me oís? No, claro que no. Seguid paseando por las calles de la laguna. Ojeando las portadas de los libros. Disfrutad de vuestras últimas horas… adiós.

viernes, 25 de abril de 2014

Muy bien. Manten la calma y sonríe. Ante todo, sonríe. Recuerda que , a fin de cuentas, se cosecha lo que se siembra. Y yo he sembrado  esta estúpida mentira. No pasa nada! Sigue respirando por la boca, no tiene porqué darse cuenta. Oh, mierda, parece que me va a hablar…
-todo bien, cariño?
Pero como va a ir todo bien si estoy a punto de asfixiarme, idiota.
-claro que si, amor mio!- respondo con una voz dulce y melódica. Que bien se me da hacerme la cursi cuando toca.
-me alegro, tesoro. No sabes lo feliz que me hace que cenemos juntos esta noche.
Es la decimocuarta vez que repites esa fracesita. Por favor, que parece que no nos veamos nunca. Si es que pasamos más tiempo en la cama que en la calle. como se nota el poco tema de conversación que hay.
-a mi también me hace super feliz! – no puedo decir más. Literalmente, no puedo decir más. Me estoy empezando a poner completamente roja. Por mucho que respire por la boca el olor se cuela, dios. Se me van a saltar las lágrimas del asco.
-sabes? Siempre me ha hecho ilusión poder cocinar para la chica a la que quiero.
Ohh, que, mono. Si vieras lo mono que eres. Seguro que tu abuela te adora. Seguro que es la envidia de entre todas sus amiguitas del asilo por el pedazo de nieto que tiene. Porqué no cocinas esta mierda para ella?
-oh, cosita mía, pero que cosas dices! Seguro que está requeterico!
Llegados a este punto está claro que esto se me ha ido completamente de las manos. Quiero salir de aquí. necesito respirar aire fresco.  Si es que en el fondo me merezco esta tortura. Quien me mandaba a mi a decirle a este tío que me encantaban las lentejas?? Aunque también tiene tela, eh? a quien se le ocurre preguntarle eso a alguien en pleno coito?? Pues claro que dije que si, como para gritar no en un momento así!!pensaba que había merecido la pena engañarme en aquel momento. Y una mierda. Este sufrimiento no lo cambio ni por el mejor polvo del mundo. Bueno, por el mejor si. Pero no por el que me espera. Que no es por nada, hijo, pero los he tenido mejores.
-cariño, te ocurre algo? Estás muy callada…
Ay dios. que carita me pones. He dicho ya lo mono que eres? Si, seguro que sí. Tienes que llamarme siempre cariño? En serio? No están ya bastante asquerosas las lentejas como para que encima les tengas que añadir tres toneladas de empalagosismo barato? Joder, si no estuvieras tan bueno ya te habría dejado por otro.
-si, bueno… no se… la verdad es que no tengo mucha hambre… y si pasaramos directamente… al postre?
divina. Coqueta. Monísima. Premio. Que escapada más buena se me ha ocurrido. Si es que por algo soy mía. Ahora solo me queda esperar a que acepte mi propuesta con su estúpido tonito de niño bueno y empezar la diversión de una vez. Que no tengo hambre? Y una mierda. Ya verás el hambre que tengo cuando te lo coma todo.
-Pero tu que coño te has creido, pedazo de puta???
Del salto que pega se le cae el vaso de la mesa. Perdón? He oído bien?
-encima que me molesto en prepararle a una pijolis como tú una cena de mierda como esta para que esté contentita, encima que llevo toda la tarde con el pestazo a lentejas atufándome toda la casa, encima! que me molesto en hacerme el ñoño para que la señorita se sienta como una princesita, no, no no no, tu de esta casa no te vas sin haberte comido las putas lentejas, me oyes?
Wau. Que sexy se ha puesto de repente. Me dan ganas de hacérselo sobre las lentejas. Si es que si lo piensas, eso si que tendría morbo. Aunque pensándolo mejor, debería gritarle. Que el niñato me ha llamado puta, quien se ha creido. Pero nah, que sentido tendría. Yo no soy así. Mejor me siento y me trago las malditas hortalizas sin respirar. Mientras vuelve a sentarse, ya otra vez con su habitual sonrisita de príncipe de ñoñilandia, exclamo; “ummm, están deliciosas, cariñito mio!” y, tras una leve pausa, me responde sonriente:

“me alegra que te gusten, las he preparado con todo mi amor!”

viernes, 28 de marzo de 2014

Tres golpes de fusta. un tirón en las esposas metálicas que irritaban la piel de sus muñecas. “arre, caballo!! Arre!!” me limitaba a gritar, una y otra vez, con todas mis fuerzas, para así, contrayendo mi diafragma, ocultar lo acelerada que iba mi respiración.
-por favor, señorita. No tire tan fuerte.- decía él, con un tono tranquilo y apacible. Esa serenidad aumentaba el ritmo de mi respiración, así como la necesidad de fustigarle.
-los caballos no hablan!! Grité, entre fustazos.- siempre tienes que cargarte el juego!!- la frustración me podía.
-si me permite decirle, señorita, los caballos tampoco llevan antifaz. Y ya puestos, tampoco van esposados.
-a callar!!!- grité, en un tono más alto y agudo, si cabe. No era justo, nunca me dejaba disfrutar. Maldito sea. Las lágrimas se me saltaban de la rabia. Me ardían las mejillas y las orejas. Era una fiebre de frustración, odio, pasión y rabia.
-porqué no jugamos con sus muñecas, señorita? Estos juegos son  algo inapropiados para su edad…
-IDIOTA!! Le grité. Siempre tenía que sacar el tema, siempre… -TONTO!!!IMBECIL!!!- ahora su cuerpo temblaba por el dolor que le causaban mis desenfrenados golpes. No podía parar. Mis lagrimas me quemaban la cara y saltaban propulsadas por la brusquedad de mis movimientos . -¡¡mis muñecas son feas, no quiero jugar con ellas!! Yo quiero jugar contigo!!! Me iba muy rápido el corazón, sobre todo al decir esto último.
-pero su padre ha trabajado tanto para proporcionárselas, debería serle más agradecida.- intentó replica el mientras trataba de reprimir los gemidos de dolor. Pero los temblores de sus brazos le delataban.
De pronto, un golpe seco en su omoplato derecho hizo que la fusta se partiera en dos. La vara de madera se deshizo en dos fragmentos de mil astillas, de entre las cuales una centena rozó mi mano, una docena la raspó y una de ellas se clavó. Era curioso. Por muchos esfuerzos que hiciera, por mucho que me esforzara a lo largo de mi corta vida,  yo seguía sin poder ocultar el dolor. No entendía como lograban los mayores reprimir las lágrimas cuando les dolía algo, al igual que no entendía como yo no era capaz de hacer algo que parecía tan sencillo como no llorar, pero sin embargo sí que era capaz de desarrollar sentimientos tan fuertes hacia una persona. Mi vista se nubló y emití un quejido, seguido de un sollozo. La mano me temblaba, la tenía totalmente raspada y sangrienta. A quien quería engañar? Por mucho que comprara a escondidas juguetes para mayores, por mucho que le obligara a él a jugar conmigo… yo solo era una niña, y el mi mayordomo. Era imposible que mi amor fuera correspondido.
Pero de pronto,  noté como me caía de su espalda bruscamente, quedándome bocarriba, tumbada sobre el suelo. Si antes estaba yo encima de el, ahora era el quien estaba encima de mi. Se había quitado el antifaz, me había agarrado de la mano y me estaba examinando la herida, preocupado. Me sequé las lagrimas con la mano libre y contemplé fijamente su rostro. palidecí al vi sus ojos enrojecidos, sus mejillas humedecidas. Todo este tiempo, todo el tiempo que había estado pegándole, había estado llorando? O no? La loca esperanza de que sus lágrimas hubiesen nacido del sentimiento de preocupación surgió dentro de mi pecho. Pero yo sabía que aquello era imposible. Yo era tan solo una niña malcriada y el un adulto que nunca podría corresponderme. Punto.
-señorita –me dijo de repente, con un tono severo, tan severo que me pinchó en el corazón. – le he permitido que haga muchas cosas; me ha esposado, se ha montado sobre mi, me ha tapado la cara repetidas veces. Ha usado conmigo toda clase de objetos sospechosos finjiendo desconocer su verdadero uso pero aplicándolo de un modo inquietantemente correcto. Pero no pienso dejar, bajo ningún concepto… que se lastime a si misma. No pienso soportar la idea de volver a ver la sangre en su piel ni una sola vez más.

Y dicho eso, noté por primera vez en mi vida la sensación de los labios de la persona a la que amaba sobre los míos.